El submarino de Fred Lucas, una historia de éxito.

Fred DeLuca a los 17 años nunca imagino que con su largo pan submarino sería el gran rival de la poderosa cadena Mc Donalds, el solo quería ser psicólogo pero necesitaba dinero para esos estudios universitarios y  entonces buscó el auxilio de su amigo Peter Buck, quien no solo lo aconsejó a que abriera un sitio de comida rápida especializado en sandwiches submarinos, sino le prestó mil dólares para abrir ese negocio el 28 de agosto de 1965 en Bridgeport, Connecticut. Ese día comenzó la historia de una de las empresas de comida rápida más exitosa en la historia de estos negocios: Subway.

Para agradecer el gesto de su amigo, DeLuca decidió llamar a su naciente negocio de submarinos sandwiches, “Pete’s Submarines” y así promovieron el establecimiento con la publicidad, pero decidieron cambiar el nombre a Pete’s Subway porque las personas al escuchar la mención por radio entendían Pizza Marines. Al crecer el proyecto lo dejaron simplemente  bajo la marca Subway, tal y como se conoce hoy en día. El inicio fue complicado, no obstante abrieron un segundo local donde tampoco las cosas marchaban del todo bien. Sin embargo en un gesto de osadía, inauguraron una tercera tienda donde lograron mejores resultados. Ya estaban listos para el siguiente salto.

FRANQUICIAS, LAS LLAVES DEL EXITO.

Ambos socios comprendieron que su ilusión de crear más establecimientos bajo su firma no daba los beneficios que esperaban, entonces su abogado les recomendó que convirtieran Subway en franquicias y el primero al que DeLuca se lo ofreció fue a su amigo Brian Dixon, quien en 1978 la comenzó en Fresno, California y después sus familiares siguieron esa iniciativa. El propio DeLuca reconoció en una entrevista antes de morir, que su negocio  no habría crecido a la velocidad que hizo sin las franquicias.

En 1984 traspasaron las fronteras de Estados Unidos y apareció la primera internacional en Bahrein. Rápidamente se expandieron hacia Europa y a otras regiones del continente americano. Comenzaba a retar a la poderosa Mc Donalds y su reino de hamburguesas.

 El producto proa de Subway es su sandwich submarino el cual desde el 2001 le diseñaron la estrategia de permitir a sus clientes elegir el tipo de pan para preparar sus pedidos y también añadieron nuevas ensaladas al menú. No cabe la menor duda que esos submarinos de 30 centímetros de largo, con comestibles que pueden combinar el cliente a su gusto y realizado a la vista del consumidor son las joyas de la corona de Subway

 Los ingredientes van desde jamón,lechuga, tomates, pepinos, queso, aun hasta huevos, champiñones, entre otros. Hasta septiembre del 2015, Subway cuenta con 44.280 restaurantes en 110 países y entre sus aciertos en costos como que la marca se pueden encontrar en disimiles sitios como Wal mart, gasolineras y no requiere una gran cocina para hacer sus productos lo cual la hace muy estimada por los franquiciadores.

ENTRE LOS MAS RICOS.

 Para el año 2007 la revista Forbes nombró al fundador, Fred DeLuca, uno de los estadounidense más ricos en el puesto 242, con un patrimonio aproximado de 1.5 mil millones de dólares, en el 2010 la cadena ya tenía más de 38 mil locales en 98 países del mundo llegando a superar en cantidad a McDonalds.

El 14 de septiembre del 2015  a los 67 años tras dos años de lucha contra una leucemia murió De.Luca, quien controlaba en el momento de fallecer la mitad de la sociedad con sede en Milford, Connecticut. El es el único que logró la proeza de desbancar a McDonald’s  en el renglon de franquicias de comida rapida y en buena medida la base de su triunfo fue proclamar que sus submarinos eran mas saludables que las hamburguesas y el pollo frito de los restaurantes rivales.

Subway prosigue su plan de expansión y según datos abre en promedio cerca de 1.500 nuevos restaurantes al año. A Fred De Luca sus seguidores lo recuerdan todavía como un hombre sencillo y jovial, sobre todo la manera con que encaró su triunfo, nunca se envaneció.  Su manera de ser la mostró cuando superó en tamaño de franquicias a Mc Donald’ s. «Si te alegras demasiado por algunas cosas, o te entristeces demasiado por otras, vas a terminar muy cansado», dijo alguna vez DeLuca, a un periódico.