Ocho claves para el trabajo remoto

Las nuevas tecnologías hacen posible que se pueda trabajar en equipo y a diario, y a cada minuto, no importa  en qué lugares del mundo residan los miembros de la plantilla de tal o más cuál empresa.Ahora hablar de “tiempos remotos” no significa pensar en la Antigüedad, sino del presente, del hoy, cuando de “trabajo en remoto” se trata y existen ocho claves para desarrollar el trabajo remoto.

Lo que no significa que sea fácil para cualquier tipo de “startup” , término con el que se conoce en el mundo empresarial a la empresa o compañía emergente, o incipiente digital, que busca arrancar, emprender o montar un nuevo negocio, con ideas en construcción.

Expertos consultados por Akimasnegocios.com coinciden en varias claves importantes para el management tradicional, a la hora de montar un equipo a distancia toda vez que gestionar la faena de quienes no se encuentran en tu oficina o ni siquiera en tu ciudad generarán  nuevos retos.

1-Vías de comunicación establecidas. Esto es lo más importante: debes escoger cuáles serán las vías de comunicación y herramientas de trabajo que utilizarás para cada proyecto y asegurarte de que todo el mundo lo sabe y las usa.Que todos conozcan a quién deben contactar para los diferentes temas.

2-Buscar personas que sepan trabajar en remoto.Formar un equipo en remoto amplía enormemente el abanico de posibilidades de contratación. Podemos tener la sede en Estados Unidos, contratar a un programador en China y a una persona de ventas en España.Si son empleados con experiencia en el trabajo a distancia, pues mucho mejor al garantizarse las habilidades especiales además de confiar en su organización, autosuficiencia y sobre todo, constancia en el trabajo.

3-Plazos y expectativas claras.  De forma remota se vuelve un punto más crítico, al no poder simplemente acercarte a la mesa de alguien para preguntarle cómo le va el trabajo. Todos los miembros del equipo deben saber qué se espera de ellos exactamente y qué plazos tienen para cada una de sus tareas.

4-Tecnología a tu favor.Gracias a un internet con velocidades de conexión cada vez más rápidas, vivimos mucho más conectados. Muchas empresas aprovechan esto para desarrollar hardware y software que favorezca esta conexión en cualquier ámbito de nuestras vidas, incluido el laboral. Hay herramientas  en Google,por ejemplo, que permiten mantener videoconferencias grupales de manera sencilla, estén donde estén y eliminan muchas barreras que genera la distancia

5- Confía en tu equipo. Con los equipos remotos pierdes la sensación de control que ofrece tener a tus trabajadores en la oficina, al no saber si laboran o no y a qué se dedican en cada momento. Hay que basar la relación en la confianza, la comunicación y los resultados.

6-Haz notar tu presencia. Un error bastante habitual en los equipos remotos es que sólo se comunican cuando es estrictamente necesario (laboralmente hablando).A pesar de la distancia hay que intentar mantener una comunicación más cercana. Preguntar al equipo qué tal se encuentra por la mañana, compartir información personal, buenas noticias, preocupaciones, agradecer la ayuda, felicitar el trabajo bien hecho o simplemente hablar sobre tus aficiones, ayuda a generar cohesión.

7- Reuniones periódicas. Dependiendo de cómo sea el flujo de trabajo,y sus características las reuniones periódicas podrían ser diarias,semanales, mensuales,  vía Skype o Hangout, para  tomar decisiones y repartir tareas.La coordinación es esencial.La distancia de un equipo puede hacer que la coordinación se vea resentida y es por ello que se debe  prestar una atención especial. El líder del equipo debe tener muy claro cuáles son los objetivos y prioridades de la empresa para realizar un “mapeo” de tareas y metas.

8-Consolidar la cultura del “team work”. Uno de los peligros de tener un equipo remoto es que puede ser más difícil crear esa cultura de startup para que todos trabajen unidos por un mismo objetivo. Ese espíritu de unión puede lograrse en  esas reuniones remotas y, si es posible, crear algún evento una vez al año por lo menos en el que todos se encuentren físicamente.

¿Le parecieron idóneas estas sugerencias? ¿Cree que se deben agregar otras más? Pues envíenos las suyas.