Internet, la nueva lampara de Aladino

Los seres humanos que transitan por el siglo 21  donde la tecnología cada día revoluciona más nuestras vidas tienen en sus manos una suerte de lámpara de Aladino con las computadoras y móviles cuyo genio llamado Internet los ayuda en trabajos e indagatorias impensables  siglos atrás.

Las nuevas formas de comunicación sobrepasan  las imaginaciones más fértiles, sin embargo pese a todos los adelantos hay una parte voluminosa de la humanidad que todavía esta desconectada de Internet y no posee los beneficios de esa maravilla del conocimiento humano.

Un estudio llamado “Desconectados y atrasados: las barreras frente a la adopción de Internet”, que realizó la firma “McKinsey & Company” en colaboración con Facebook, arrojó que 4 mil 400 millones de personas no tienen acceso a la red y de esa cifra el 77 por ciento se concentra en 20 naciones. El sondeo indica además que  fuera del alcance de una red móvil se encuentran entre mil 100 y dos mil 800 millones de personas, lo cual entorpece la inclusión digital en todos los sectores.

No resulta secreto para nadie la importancia financiera que representa esta herramienta de las redes y la necesidad de la conexión mundial en esta etapa de globalización económica. Por eso no es raro que las redes sociales como “Facebook” y “Twitter” dediquen recursos importantes para investigar nuevas formas de comunicación.

La compañía del pajarito azul destinó 10 millones de dólares para que el prestigioso Instituto Tecnológico de Massachusetts (MIT, sus siglas en ingles) complete un programa con el fin de desarrollar nuevas tecnologías y aplicaciones móviles que faciliten nuevas formas de comunicación y organización social.

El MIT se centrará “en la búsqueda e investigación de patrones semánticos y sociales en el flujo de los medios de comunicación públicos”, afirma en su página web la casa de estudios, que asegura que esas pesquisas la realizará elLaboratory for Social Machines (LSM)” el cual tendrá como apoyo para sus pesquisas los 500 millones de tuits diarios que se hacen dentro de esa red social donde el máximo de expresión son 140 caracteres.

En declaraciones para la prensa, el investigador principal del LSM, Deb Roy dijo: “Experimentaremos en áreas de comunicación pública y organización social en las que los humanos y las máquinas colaboran para resolver problemas que no pueden ser solucionados de forma únicamente automatizada o manual. El flujo de datos procedentes del mundo de la social media puede funcionar como un efectivo catalizador para la transparencia, favoreciendo la visibilidad mutua entre instituciones e individuos”, afirmó.

La realidad es que la nueva era digital barre con viejos preceptos y cánones establecidos durante el siglo 20 como reconoció el presidente ejecutivo de PRISA, Juan Luis Cebrián  hace unos años en la  reunión del Consejo Empresarial de América Latina (CEAL)  donde indicó  que  el mundo enfrenta  un “tsunami digital” que ya transformó a los medios de comunicación masiva en sus modelos de negocios y la relación con los clientes.

El mundo cada día es más pequeño y la manera de comunicarse es de una celeridad tal que no nos permite el tiempo  suficiente como para asombrarnos, porque casi de inmediato nos llega una nueva aplicación novedosa gracias a Internet que ya convirtió casi en obsoletos al teléfono y el fax, debido a su mensajería inmediata, trajo nuevas formas para la publicidad y posibilita  millonarios negocios mundiales que pueden realizarse con poco recursos económicos.

No cabe la menor duda que si el genio de Aladino existiera tendría dentro de su vivienda una conexión con internet, ese hacedor  que  cambió  las actividades antes solo concebidas como físicas a un espacio virtual que  expande los mercados y la inteligencia a niveles que el pobre genio no pudiera pensar.