Contratar de manera humana no científica.

Contratar de manera humana no científica al personal que trabajara con nosotros es una modalidad que debería retornar, ya que en los últimos tiempos algunas empresas  comenzaron un proceso enloquecedor para seleccionar a su personal basado en engorrosos exámenes psicológicos, pruebas de matemáticas con trampas y otras tonterías que poco o nada tienen que ver con el puesto al que aspira el pretendiente y se pierde de vista el carácter humano de la entrevista, la intuición del reclutador. Ocurre que en muchas ocasiones con ese novedoso método “científico” las empresas eligen a un candidato solo por aprobar esas pruebas y dejan escapar al verdadero talento, capaz de impulsar la empresa.

  Muy a menudo el prospecto contratado no da la talla y hay que reiniciar el proceso de captación bajo el mismo procedimiento. Los nuevos emprendedores por lo general no tienen los recursos necesarios para contratar  a psicólogos laborales y deben fiarse de los signos que deja su candidato. Un exitoso hombre de negocios de Wall Street como Bill Ackman es de los que se deja llevar por el talento que exhiben las personas cuando hablas con ellos.

 Ackman no lo pensó dos veces para reclutar dentro de su nomina  a un muchacho que le sirvió de guía durante un viaje para pescar. El muchacho mostró pasión por las finanzas y aunque era un autodidacta el avezado inversionista se lo llevó como analista bursátil. De igual manera hizo con un taxista y su profesor de tenis. No le importó el currículo, sino el talento que exhibieron.

 A veces el candidato,  por las paradojas de estos tiempos modernos donde alcanzar un empleo luego de graduado es una tarea hercúlea, cae atrapado en la dicotomía de que le exigen experiencia y no la puede acumular porque no consigue el trabajo. Como dice ese viejo refrán. “Palos porque bogas y palos porque no bogas”.

 Uno de los aspectos importantes que un nuevo emprendedor debe buscar en sus colaboradores no son las debilidades, sino sus fortalezas y no dejarse llevar por la verborrea de esos que se “venden” como si fueran “la ultima coca- cola en el desierto”  o por todo lo expuesto dentro del currículo.

 El exitoso empresario Richard Branson indicó en una de sus tantas recomendaciones que no debemos caer en el terrible error de contratar un currículo, sino el empeño es buscar personalidad, porque al final ese es el principal material que necesitas. Un trabajador comprometido, lleno de talento puede ser entrenado para alcanzar los parámetros que necesitas dentro de tu empresa. Alguien inflado por un currículo nunca te será de utilidad.

  Sin embargo hay una serie de generalidades que sirven de ayuda para los emprendedores a la hora de seleccionar al personal que lo ayudará a llevar hacia delante su empresa.

 No tenga prejuicios por el aspecto de su prospecto. Hay personas que llegan bien vestidas, pero son ineptos y otros que no tienen suficiente vestuario en ese momento y son muy capaces. Lo más importante es que debe tener bien claro cuáles son las habilidades que necesita el candidato para realizar el trabajo.

  1. Tenga bien claro lo que desea saber del candidato antes de entrevistarlo. Luego de leer su hoja de vida ya conoce qué puntos abordar cuando hable de manera directa con su prospecto.
  2. La entrevista es un momento importante. Debe realizarse en un lugar privado. Escuche con atención a su candidato y valore sus palabras y gestos. El comportamiento corporal y la comunicación no verbal son más importantes que las respuestas del postulante.
  3. La entonación, la mirada a los ojos y una buena postura son puntos a considerar, ya que denotan seguridad en el entrevistado.Es preciso que no soslaye algún defecto por el hecho de que le atrajeron otras cualidades. Si alcanzó a notar un punto débil en el postulante imagine que convivirá con ello y que probablemente fuera de la situación de examen, ese rasgo se acentúe. Por ejemplo, si le pareció bien capacitado técnicamente pero fue impuntual, considere cómo se sentirá o cuánto impactará en la tarea el hecho de que esa persona llegue frecuentemente tarde.
  4.  Ocúpese de verificar la documentación presentada. Intente conversar con empleadores anteriores o con las personas que el candidato ofreció como referencias. Busque ratificaciones, por ejemplo, compare sus impresiones con otras personas.

  Recuerde que usted necesita personas comprometidas, optimistas y capaces de solucionar por sus propias iniciativas problemas que surjan dentro de la dinámica del trabajo y en buena medida eso lo conseguirá con una buena selección de personal. Explorar las cualidades que no muestra una hoja de vida laboral, como la curiosidad intelectual, la capacidad de autocritica, el compromiso con la autoeducación, aspiraciones y creatividad, lo puedes descubrir en la entrevista para seleccionar personal, ese paso humano que hoy a veces se olvida.